Callas cuando está lloviendo, haces invisible las penas cuando te ríes y descansas a mi lado. Me engañas con un silencio ensayado. No es miedo es la experiencia la que me dice que en invierno todo se marchita, se congela y muere, como nosotros cada noche y en cada te quiero cada vez más fingido, amor mío. Recordemos viejos tiempos, las mariposas de la primavera, el sol que calentaba en verano y un otoño que a medida que llega a su fin se lleva nuestros sueños juntos con él.
Lo quiero a morir |
No hay comentarios:
Publicar un comentario